Glencore recorta empleos y se enfoca en el cobre en medio de la adversidad
## Resumen ejecutivo
**Glencore plc** ha iniciado una importante reestructuración corporativa, anunciando la eliminación de 1.000 puestos de trabajo como parte de un programa de ahorro de costes de 1.000 millones de dólares. Esta medida, detallada durante su Día de los Mercados de Capitales de 2025, se une a un giro estratégico a largo plazo hacia la producción de cobre. Esta decisión responde a un desafiante primer semestre de 2025, en el que la empresa reportó una pérdida neta de 655 millones de dólares. El mercado ha reaccionado favorablemente al impulso de la empresa por la disciplina operativa, con sus acciones cotizadas en Londres ganando más del 6% tras el anuncio.
## El evento en detalle
La reestructuración de Glencore es un enfoque multifacético para navegar los vientos en contra económicos actuales y reposicionarse para el crecimiento futuro. La empresa está fusionando sus divisiones de **níquel** y **zinc** y reconfigurando varios activos de fundición, incluidos dos en Sudáfrica, para mejorar la eficiencia y la rendición de cuentas. Los 1.000 recortes de empleo anunciados son un componente central de un plan para lograr 1.000 millones de dólares en ahorros de costes recurrentes.
Esta tendencia de reducción de la fuerza laboral en respuesta a las presiones económicas no es aislada. La empresa química alemana **Wacker Chemie** también anunció recientemente planes para eliminar más de 1.500 puestos de trabajo, o el 9% de su fuerza laboral, para 2027. El objetivo es lograr ahorros anuales de 150 millones de euros para contrarrestar los altos costes energéticos y el aumento de la competencia de China, lo que subraya un patrón más amplio de reducción de costes entre las empresas industriales europeas.
## Implicaciones para el mercado
El cambio estratégico de Glencore ha creado una tensión notable entre su rendimiento a corto plazo y su visión a largo plazo. La producción de cobre de la empresa, de origen propio, cayó un 17% interanual durante los primeros nueve meses de 2025, hasta las 583.500 toneladas. En consecuencia, ha rebajado su previsión de producción de cobre para 2026 de un objetivo de 930.000 toneladas a un rango de 810.000–870.000 toneladas.
Sin embargo, a pesar de esta debilidad a corto plazo, la empresa proyecta un aumento significativo, con una "ruta clara" para superar 1 millón de toneladas de producción de cobre para 2028 y alcanzar aproximadamente 1,6 millones de toneladas para 2035. Esta apuesta a largo plazo por el superciclo del cobre, impulsado por la electrificación y la demanda de transición energética, ha sido bien recibida. El precio de las acciones de **GLEN** subió un 6,3% hasta los 383,10p el 3 de diciembre, cotizando cerca de su máximo de 52 semanas, lo que indica que los inversores priorizan el compromiso de la empresa con la disciplina de costes y una estrategia a largo plazo clara.
## Comentario de expertos
Los analistas se mantienen cautelosamente optimistas. Los precios objetivo de consenso a 12 meses para **GLEN** se sitúan en el rango de 390-400p, lo que sugiere un potencial de subida modesto desde su nivel actual de ~378p. El caso alcista para la acción se basa en su fuerte apalancamiento ante un aumento del precio del cobre, el flujo de caja constante de su negocio de carbón y la ejecución exitosa de sus medidas de ahorro de costes.
Sin embargo, persisten riesgos significativos. El caso bajista destaca el riesgo de ejecución operativa de Glencore, como lo demuestran las decepciones de producción pasadas, y su exposición a riesgos políticos y ESG en jurisdicciones mineras clave como Chile y Argentina. Además, el balance de la empresa presenta una elevada relación deuda-capital de más del 70%, lo que la hace vulnerable a la volatilidad del mercado y a los cambios en las condiciones crediticias.
## Contexto más amplio
Las acciones de Glencore reflejan una tendencia más amplia de las empresas industriales y de recursos que se adaptan a un entorno global complejo. Las presiones de los altos costes energéticos, la incertidumbre geopolítica y la ralentización de la demanda están obligando a grandes empresas europeas como Glencore y **Wacker Chemie** a implementar importantes medidas de reducción de costes para proteger los márgenes. Esto contrasta ligeramente con el mercado laboral estadounidense, que, según un informe de Challenger, Gray & Christmas, ha visto más de 1,17 millones de recortes de empleo en lo que va de año, el más alto desde la pandemia de 2020, pero experimentó una disminución del 53% en los despidos anunciados en noviembre.
La estrategia de Glencore es financiar su crecimiento futuro en el cobre, un mineral fundamental para la transición energética global, utilizando los flujos de caja de sus operaciones de carbón heredadas. Esta doble estrategia de invertir en metales "verdes" mientras se depende de fuentes de energía tradicionales para la financiación representa un enfoque pragmático, aunque complejo, para navegar el cambio a largo plazo en el consumo global de energía.