El Evento en Detalle
Doce senadores demócratas emitieron recientemente un comunicado pidiendo un proceso de autoría bipartidista para la próxima legislación sobre la estructura del mercado de criptomonedas. Este grupo, que incluye a los senadores Kirsten Gillibrand, Cory Booker, Ruben Gallego y Mark Warner, enfatizó la necesidad de una verdadera colaboración en la redacción de una legislación de esta magnitud, en lugar de simplemente ofrecer comentarios sobre proyectos de ley redactados por los republicanos. El llamado a la autoría compartida se produce a medida que el Senado avanza la "Ley de Claridad" hacia su posible aprobación. El presidente del Comité Bancario del Senado, Tim Scott, ha reconocido previamente que el apoyo bipartidista es crucial para que la Ley de Claridad avance, citando la aprobación exitosa anterior de la Ley Genius debido a la cooperación entre partidos. Los republicanos han indicado apertura a recibir aportes sobre el proyecto de ley. La Cámara de Representantes aprobó previamente la Ley de Claridad, que ahora está bajo consideración del Comité Bancario del Senado.
Deconstruyendo Marcos Regulatorios y Estrategia Legislativa
Los esfuerzos legislativos propuestos resaltan un enfoque divergente entre los legisladores demócratas y republicanos sobre la regulación de las criptomonedas. El marco demócrata, una propuesta de siete pilares, busca empoderar a la Comisión de Comercio de Futuros de Productos Básicos (CFTC) con nueva autoridad sobre los mercados al contado para tokens no relacionados con valores y establecer un proceso claro para determinar cuándo la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) regula un token como valor. Este marco enfatiza la protección del consumidor, la estabilidad financiera y las medidas anticorrupción, incluida una disposición para prohibir que los emisores de stablecoins ofrezcan intereses o rendimientos. Además, los demócratas han introducido la Ley COIN, que tiene como objetivo prohibir a los funcionarios públicos de EE. UU., incluido el presidente y sus familias inmediatas, obtener ganancias de activos digitales durante y durante dos años después de su mandato. Esta iniciativa sigue a los informes de que el expresidente Donald Trump ganó $57.4 millones en 2024 a través de una plataforma vinculada a criptomonedas.
Por el contrario, la Ley de Claridad respaldada por los republicanos prioriza la claridad regulatoria rápida, tiene como objetivo proteger a los desarrolladores de finanzas descentralizadas (DeFi) y presenta reglas éticas menos restrictivas, posicionándola como una propuesta más amigable para la industria. Esta Ley clasifica los criptoactivos en tres clasificaciones: productos digitales, activos de contratos de inversión y stablecoins de pago permitidas, definiendo las obligaciones regulatorias de la CFTC y la SEC en función de estas categorías. La Ley de Claridad busca además eximir los productos digitales de las leyes de valores estatales y otorga a la SEC jurisdicción exclusiva sobre los activos de contratos de inversión, mientras exige el registro de la CFTC para los intermediarios que manejan productos digitales.
Ambas agencias han estado activamente involucradas en el espacio de los activos digitales. La SEC continúa clasificando la mayoría de las ofertas iniciales de monedas (ICO) y las ventas de tokens criptográficos como ofertas de valores, con el 58% de sus casos de aplicación de criptomonedas de 2024 relacionados con valores no registrados. La CFTC supervisa los mercados de derivados de criptomonedas, tratando activos como Bitcoin y Ethereum como productos básicos, con el 74% de sus casos de 2024 relacionados con esquemas de comercio fraudulentos. Colectivamente, la SEC y la CFTC impusieron más de $4.3 mil millones en multas a empresas de criptomonedas entre 2023 y 2024. En un desarrollo notable, una Declaración Conjunta del 2 de septiembre de 2025 de la SEC y la CFTC aclaró que las bolsas registradas están permitidas para listar y facilitar el comercio de ciertos productos de criptoactivos al contado, incluidos aquellos que involucran apalancamiento o margen, bajo las regulaciones existentes. Esta declaración señala un cambio estratégico hacia una mayor alineación regulatoria.
Implicaciones para el Mercado
El impulso continuo para una legislación integral sobre criptomonedas, si bien introduce incertidumbre política a corto plazo, conlleva importantes implicaciones a largo plazo para el mercado de activos digitales. El potencial de un marco regulatorio claro y unificado podría fomentar la adopción institucional y la innovación dentro de los Estados Unidos. Se espera que la Declaración Conjunta de la SEC y la CFTC sobre el comercio de criptomonedas al contado en bolsas registradas ya aliente a las principales instituciones financieras como Nasdaq, NYSE, CME Group y CBOE a explorar la cotización de dichos productos, lo que podría conducir a un aumento en la entrada de capital institucional.
Sin embargo, la dirección específica de la regulación —si se alinea más estrechamente con el enfoque de protección al consumidor y anticorrupción de los demócratas o con el enfoque favorable a la industria de los republicanos— dictará la respuesta del mercado. Disposiciones como una posible prohibición de los rendimientos de las stablecoins, como proponen los demócratas, podrían afectar ciertos segmentos del mercado al evitar que las stablecoins funcionen como cuentas de ahorro no reguladas. El aumento de las acciones de cumplimiento por parte de la SEC y la CFTC en 2024, incluido un aumento del 16% en las acciones de la SEC y un aumento del 59% en los casos de la CFTC, subraya la supervisión regulatoria activa que ya está en marcha, independientemente de la nueva legislación. Los esfuerzos legislativos actuales tienen como objetivo ir más allá de la "regulación por aplicación" para proporcionar la certeza legal tan necesaria.
Contexto más Amplio
El enfoque del Congreso en la legislación sobre activos digitales refleja un creciente reconocimiento de la valoración de casi $4 billones del mercado de criptomonedas y su creciente relevancia para la economía de EE. UU. Este impulso legislativo también está influenciado por consideraciones políticas, con los demócratas considerando activamente cómo la regulación de las criptomonedas impacta la competitividad en futuras elecciones, como las de noviembre de 2026. El cambio hacia un enfoque regulatorio más completo y bipartidista, que podría culminar en legislación para fines de 2025 según lo sugerido por el presidente del Comité Bancario del Senado, Tim Scott, significa un momento crucial para el desarrollo y la operación de las criptomonedas en EE. UU. Un marco regulatorio adaptado podría solidificar la posición de Estados Unidos como líder global en finanzas digitales al proporcionar claridad y fomentar la innovación dentro de límites regulados.