Resumen ejecutivo
IoTeX está transformando su plataforma para convertirse en un "Ecosistema Abierto para la IA del Mundo Real", una evolución estratégica marcada por la iniciativa IoTeX 3.0. Este desarrollo tiene como objetivo conectar los datos físicos con los modelos de inteligencia artificial a través de una sofisticada pila tecnológica de tres capas. Los componentes principales incluyen una capa de Ingestión de Datos, una capa de Verificación y Procesamiento de Datos impulsada por Quicksilver, y una capa de Núcleo de IA Adaptable dirigida por Realm. El token nativo IOTX sustenta este ecosistema, facilitando las transacciones, el staking y la gobernanza. IoTeX está expandiendo activamente su presencia dentro de las instituciones estadounidenses para mejorar la accesibilidad del token IOTX, lo que indica un esfuerzo concentrado en una integración y utilidad más amplias en el mercado.
El evento en detalle
La expansión de IoTeX hacia la inteligencia artificial establece lo que denomina el primer ecosistema abierto del mundo para la inteligencia física. Esta nueva categoría de inteligencia está diseñada para utilizar datos en tiempo real obtenidos de máquinas, sensores e infraestructura descentralizada. El desarrollo estratégico de la plataforma aborda el desafío actual de los modelos de IA que operan en la abstracción al basarlos en datos del mundo físico confiables y en tiempo real.
La base tecnológica de este ecosistema se construye sobre una pila de IA del mundo real de tres capas. La capa inicial se enfoca en la ingestión de datos, conectando diversas fuentes de datos centralizadas y descentralizadas, incluidas las API y la infraestructura modular DePIN. La segunda capa, de verificación y procesamiento de datos, introduce Quicksilver, un marco de código abierto diseñado para la agregación, el formato, la indexación y la prueba verificable de datos. Esta capa facilitará la conexión de grandes modelos de lenguaje (LLM) con dispositivos DePIN. La tercera capa, el Núcleo de IA Adaptable, integra Realm para el entrenamiento de modelos de base y específicos del dominio, junto con inferencias de IA. IoTeX, funcionando como una blockchain modular de Capa 1 y una plataforma de middleware, conecta estas diversas transmisiones de datos del mundo real a modelos y aplicaciones de IA. Con más de 50 proyectos DePIN y 958,000 dispositivos inteligentes ya integrados, IoTeX tiene como objetivo expandir aún más su ecosistema dentro del sector de la IA del mundo real en rápido crecimiento.
Implicaciones para el mercado
El giro estratégico de IoTeX hacia la IA del mundo real posiciona la plataforma dentro de un mercado proyectado para un crecimiento sustancial. Se estima que el mercado de IA empresarial alcanzará los 450 mil millones de dólares para 2030, mientras que se pronostica que el mercado de IA de consumo alcanzará los 674.49 mil millones de dólares para el mismo año. El enfoque de IoTeX en habilitar interacciones seguras, escalables y centradas en la privacidad entre dispositivos, humanos, aplicaciones descentralizadas y agentes de IA tiene como objetivo potenciar una economía de agentes descentralizada.
El token IOTX, con un suministro actual de 9.44 mil millones después de varias quemas de tokens de su suministro máximo limitado de 10 mil millones, es fundamental para las operaciones del ecosistema, asegurando varios casos de uso. Para mejorar la accesibilidad al mercado y fomentar el crecimiento del ecosistema, IoTeX ha participado en una expansión estratégica dentro de los Estados Unidos. Las asociaciones con instituciones y plataformas destacadas como Grayscale, Coinbase, Kraken, Robinhood, PayPal y Venmo tienen como objetivo aumentar la facilidad de adquisición del token IOTX para una audiencia más amplia.
El sector DePIN en sí mismo ha surgido como una fuerza significativa en el panorama de las criptomonedas, abordando los desafíos de infraestructura al aprovechar blockchain para el crowdsourcing de hardware, mano de obra y experiencia. El papel de IoTeX como una capa fundamental, similar a un "núcleo de Linux" para la infraestructura modular DePIN, subraya su posicionamiento estratégico a largo plazo. Se anticipa que el lanzamiento planificado de la Testnet de Quicksilver en el primer trimestre de 2025 facilitará una nueva generación de aplicaciones de IA sensibles al unir las infraestructuras DePIN existentes con las tecnologías de IA emergentes. Además, los proyectos que utilicen Quicksilver tendrán capacidades de implementación entre cadenas en Solana, Ethereum y la IoTeX L1, mejorando la interoperabilidad. IoTeX también planea crear una reserva estratégica, financiada inicialmente por Bitcoin (BTC), para proporcionar estabilidad y soporte para su ecosistema descentralizado y los titulares de IOTX.
Comentario de expertos
Raullen Chai, cofundador y director ejecutivo de IoTeX, ha declarado que "los datos del mundo real son el eslabón perdido en la pila actual de IA", enfatizando que la expansión de IoTeX desbloquea "una capa de inteligencia en constante evolución, abierta a cualquiera que quiera contribuir, construir o implementar". Chai explicó además que IoTeX permite "una nueva clase de IA basada en la realidad". La investigación de Animoca Brands ha destacado la evolución de IoTeX hacia un ecosistema abierto para la IA del mundo real, subrayando su importante papel en la conexión de datos del mundo real con modelos de IA y en la promoción de la adopción de proyectos DePIN.
Contexto más amplio
La integración de la tecnología blockchain con la inteligencia artificial, particularmente en el contexto de los datos del mundo real, representa un área crítica de innovación. El desarrollo por parte de IoTeX de un ecosistema abierto para la inteligencia física tiene como objetivo transformar las redes descentralizadas en una base robusta para sistemas de IA del mundo real reactivos. Esta iniciativa posiciona a IoTeX para capitalizar la creciente demanda de los desarrolladores de IA de datos verificables y en tiempo real al proporcionar un suministro global y sin permisos de información generada por máquinas. Esto tiene como objetivo fomentar un futuro en el que los sistemas inteligentes puedan detectar, razonar y actuar de manera efectiva en sincronía con sus entornos físicos, llevando la IA más allá de los entornos digitales aislados a la interacción con el mundo.