El sector aeroespacial y de defensa continúa su ascenso impulsado por la dinámica geopolítica

Las acciones estadounidenses en el sector aeroespacial y de defensa han demostrado un impulso ascendente sostenido, con el ETF Invesco Aerospace & Defense (PPA) cotizando por encima de los 150 dólares después de un notable repunte desde principios de abril de 2025. Este rendimiento refleja una creciente confianza de los inversores impulsada por un panorama de defensa global acelerado y prioridades geopolíticas cambiantes.

Rendimiento del ETF y factores clave

El PPA, que sigue el Índice de Defensa SPADE™, experimentó un fuerte repunte, pasando de aproximadamente 105 dólares a principios de abril a un rango de 151 dólares durante los cinco meses siguientes, alcanzando un nuevo pico histórico a principios del tercer trimestre de 2025. Este ascenso se produjo después de una corrección en el segundo trimestre de 2025, donde el ETF cayó más del 19,6% desde un máximo histórico en el cuarto trimestre de 2024. Al 28 de julio de 2025, el ETF gestionaba 6.080 millones de dólares en activos bajo gestión (AUM) y negociaba un volumen diario promedio de 253.251 acciones. Mantiene una comisión de gestión del 0,57% y ofrece un rendimiento de dividendo combinado del 0,44%.

El principal catalizador de esta tendencia alcista sostenida es un aumento sustancial en el gasto global en defensa y el aumento de las tensiones geopolíticas. Veintitrés de los veintisiete miembros de la OTAN de la UE se han comprometido formalmente a destinar al menos el 3,5% de su PIB a gastos de defensa. Además, Canadá ha expresado interés en colaborar con Estados Unidos en el proyecto del escudo de defensa de misiles "Golden Dome", lo que subraya un impulso colectivo hacia capacidades de seguridad mejoradas.

Rendimiento de las empresas subyacentes y posicionamiento estratégico

Las empresas dentro del ETF PPA están estratégicamente posicionadas para beneficiarse significativamente de estos cambios. RTX Corporation (RTX), una participación significativa con un peso del 7,54% en el ETF, informó sólidos resultados financieros para el segundo trimestre de 2025, con ingresos de 21.600 millones de dólares, lo que marca un aumento del 9% interanual. El ingreso neto alcanzó los 1.700 millones de dólares, lo que arrojó un margen de beneficio del 7,7%, y su beneficio por acción (BPA) trimestral de 1,56 dólares superó el consenso de los analistas de 1,45 dólares. RTX mantiene una sustancial cartera de pedidos de 236.000 millones de dólares a partir del segundo trimestre de 2025, con 92.000 millones de dólares específicamente de contratos de defensa.

De manera similar, L3Harris Technologies (LHX), con un peso del 4,06%, informó 8.000 millones de dólares en nuevos pedidos durante el segundo trimestre de 2025, expandiendo su cartera de pedidos a 35.400 millones de dólares, de los cuales 20.000 millones de dólares se atribuyen a pedidos relacionados con la defensa. General Dynamics (GD) también ha visto su cartera de pedidos alcanzar un "máximo histórico" de 91.100 millones de dólares a partir del segundo trimestre de 2025, lo que representa un crecimiento del 14,5% en seis meses. Incluyendo los contratos IDIQ, esta cifra asciende a 161.200 millones de dólares.

Solo el proyecto de defensa de misiles multicapa "Golden Dome" de EE. UU. se proyecta que generará más de 175.000 millones de dólares en contratos de defensa durante los próximos tres años, con un costo estimado de 831.000 millones de dólares en costos posteriores a la iniciación durante las dos décadas siguientes. Esta tendencia se ve reforzada por la "Ley de un Gran y Hermoso Proyecto de Ley de 2025" del presidente Trump, que añadió 150.000 millones de dólares al presupuesto del Pentágono para iniciativas como el sistema de defensa de misiles, la adquisición de armas, la construcción naval y la seguridad fronteriza.

Contexto de mercado más amplio y perspectivas de los analistas

El Índice S&P Aerospace and Defense Select Industry subió un 44% en lo que va de 2025, superando significativamente al Índice S&P 500 más amplio, que obtuvo un retorno del 10,3% en el mismo período. Este rendimiento sustancialmente superior destaca la confianza de los inversores en la resiliencia y las perspectivas de crecimiento del sector de defensa, que cada vez se considera más aislado de las fluctuaciones económicas más amplias debido a su dependencia de los contratos gubernamentales.

El repunte sostenido de las acciones de defensa es una consecuencia directa de un entorno geopolítico que se deteriora rápidamente, incluidos los conflictos en curso en Europa del Este y Oriente Medio, que han impulsado a los países de todo el mundo a modernizar sus arsenales y reforzar sus capacidades de seguridad. Según el análisis de Morgan Stanley, los líderes de la defensa europea como Airbus y Rheinmetall también están preparados para un crecimiento significativo. La Tasa de Crecimiento Anual Compuesta (CAGR) del Beneficio por Acción (BPA) de Rheinmetall se estima en un 32% entre 2024 y 2030, basándose en que los países de la OTAN cumplan el objetivo de gasto en defensa del 2% del PIB. Los nuevos objetivos de la OTAN del 3,5% del PIB para 2035 representan un potencial alcista adicional.

Implicaciones futuras y puntos clave de observación

Las perspectivas a largo plazo para el sector aeroespacial y de defensa siguen siendo alcistas, respaldadas por compromisos políticos sostenidos y cambios de política estratégica. En la Cumbre de la OTAN de 2025 en La Haya, los aliados se comprometieron a invertir el 5% de su producto interno bruto (PIB) anualmente en requisitos de defensa básicos y gastos relacionados con la seguridad para 2035, un aumento significativo con respecto al 2,61% en 2024.

En Europa, el plan ReArm Europe de la Comisión Europea tiene como objetivo flexibilizar las reglas fiscales, permitiendo a los estados miembros gastar 650.000 millones de euros adicionales en defensa, e incluye un fondo de préstamos para armas de 150.000 millones de euros para facilitar la adquisición de sistemas de armas. En el frente estadounidense, la administración propuso un presupuesto de defensa sustancial de 849.800 millones de dólares para el año fiscal 2025, con 156.200 millones de dólares adicionales en nuevos fondos para prioridades de seguridad nacional.

Estos compromisos en curso y la necesidad continua de una seguridad nacional e internacional mejorada sugieren un crecimiento continuo de los ingresos y oportunidades de contratos para las empresas del sector. Los avances tecnológicos en ciberseguridad, sistemas autónomos impulsados por IA, armas hipersónicas y activos de defensa basados en el espacio también están dando forma a la demanda futura. Los inversores seguirán de cerca el progreso de estos compromisos geopolíticos, los cronogramas de los principales proyectos de defensa y los informes de ganancias trimestrales de los principales contratistas de defensa para un impulso sostenido en los próximos trimestres.