Alemania se embarca en un importante programa de rearme, marcado por la aprobación parlamentaria de sustanciosos contratos de defensa y una duplicación planificada de su presupuesto anual de defensa. Este cambio estratégico está llamado a remodelar el panorama de la defensa europea y presenta considerables oportunidades para los contratistas de defensa.

El aumento del presupuesto de defensa señala un cambio estratégico

La comisión de presupuesto del Bundestag alemán aprobó recientemente una serie de importantes adquisiciones de defensa, lo que indica un profundo cambio en la estrategia militar y las prioridades de gasto de la nación. Estas aprobaciones incluyen un pedido de mil millones de euros para drones Heron fabricados en Israel y un contrato de 114 millones de euros con Lockheed Martin para la conversión de lanzadores de misiles Patriot. Esto forma parte de un plan más amplio para casi duplicar el presupuesto anual de defensa de Alemania a 162 mil millones de euros en los próximos cuatro años, posicionándolo muy por encima del punto de referencia del 3,5% del PIB de la OTAN para el gasto central.

Este impulso de rearme representa un cambio significativo de décadas de contención de posguerra, con el objetivo de transformar la Bundeswehr en la fuerza convencional más capaz de Europa. Se anticipan más de 80 adquisiciones adicionales, que abarcan 20 aviones Eurofighter y miles de vehículos blindados, antes de fin de año.

Detalles clave de adquisición

El pedido de mil millones de euros para drones Heron, desarrollados por Israel Aerospace Industries (IAI), destaca el compromiso de Alemania de modernizar sus capacidades de vigilancia y ataque. IAI, un fabricante estatal de defensa y aeroespacial, informó su desempeño trimestral más sólido en el primer trimestre de 2025, con un ingreso neto que aumentó un 21% a 164 millones de dólares y ventas que aumentaron un 12% a 1.610 millones de dólares. La cartera de pedidos de la compañía alcanzó un máximo histórico de 26.100 millones de dólares, lo que representa aproximadamente 4,3 años de operación.

Para reforzar aún más sus capacidades de defensa, Alemania ha obtenido un contrato de 114 millones de euros con Lockheed Martin (LMT) para convertir lanzadores de misiles Patriot, con algunas unidades destinadas a Ucrania. Además, las aprobaciones incluyen vehículos blindados de transporte de personal de seis ruedas de la empresa finlandesa Patria Land Oy. Las futuras adquisiciones son extensas, y se espera que solo el pedido de Eurofighter cueste entre 4 mil millones y 5 mil millones de euros, los vehículos Boxer (construidos por KNDS y Rheinmetall) se estiman en 10 mil millones de euros y los vehículos Patria en aproximadamente 7 mil millones de euros. Se prevé que las entregas de estas plataformas importantes se realicen durante la próxima década.

Implicaciones para el mercado del sector de defensa

El agresivo programa de rearme de Alemania está generando un sentimiento alcista dentro del sector global de defensa. Se espera que este aumento del gasto se traduzca en un crecimiento significativo de los ingresos y en una expansión de las carteras de pedidos de los contratistas de defensa, en particular aquellos con fuertes lazos con los mercados europeos. La medida se alinea con una tendencia más amplia de aumento del gasto militar en todo el mundo, impulsada por la escalada de las tensiones geopolíticas y los conflictos en curso.

Los principales índices y sectores, incluido el Sector de Defensa y el Mercado Europeo de Defensa, están preparados para un crecimiento sostenido. Los fondos cotizados en bolsa como el iShares U.S. Aerospace & Defense ETF (ITA) y el SPDR S&P Aerospace & Defense ETF (XAR) podrían ver un mayor interés. Empresas específicas ya están experimentando ganancias sustanciales. Rheinmetall, por ejemplo, vio sus acciones aumentar un 184% en lo que va del año, con Hensoldt subiendo un 162%, Saab un 120% y Leonardo un 82%.

Los principales contratistas de defensa globales como Lockheed Martin, RTX (anteriormente Raytheon Technologies) y General Dynamics han reportado carteras de pedidos récord, beneficiándose de una fuerte demanda de sistemas de defensa avanzados. La cartera de pedidos de Lockheed Martin alcanzó los 150 mil millones de dólares a principios de 2023, mientras que RTX registró una cartera de pedidos de defensa total de 70 mil millones de dólares en el cuarto trimestre de 2022.

Contexto más amplio y panorama de la defensa europea

Este cambio estratégico de Alemania es una respuesta a un entorno geopolítico que se deteriora rápidamente, en particular el conflicto en Ucrania, que ha provocado una reevaluación generalizada de las posturas de defensa en toda Europa. El compromiso del gobierno alemán se extiende más allá de las adquisiciones específicas, con el canciller Friedrich Merz presionando para eximir el gasto de defensa de los límites de deuda constitucional, proyectando un presupuesto de defensa regular de 83 mil millones de euros (95,8 mil millones de dólares) para 2026.

El plan alemán, estimado en más de 350 mil millones de euros en total, prioriza estratégicamente a las empresas de defensa europeas como KNDS y Rheinmetall para reducir la dependencia de Estados Unidos y acelerar la modernización militar. Esto se alinea con iniciativas más amplias de la UE como la Iniciativa Europea de Escudo del Cielo (ESSI) y Readiness 2030, que enfatizan la adquisición conjunta y la solución de las brechas de capacidad. Los analistas proyectan que los presupuestos de defensa europeos podrían alcanzar colectivamente 1 billón de euros anualmente para 2030, lo que impulsaría un ciclo de crecimiento sostenido para los contratistas de defensa en todo el continente.

Perspectivas de los analistas y futuro

Los analistas de Barclays han iniciado la cobertura de varias empresas de defensa europeas, señalando un posible “superciclo” en el gasto de defensa que podría extenderse hasta la década de 2030. Consideran que el presupuesto de Alemania es particularmente creíble dentro de esta tendencia.

“La región, subinvertida durante más de dos décadas después de la Guerra Fría, ahora se enfrenta a un posible superciclo en el gasto de defensa que podría extenderse hasta la década de 2030.”

Rheinmetall, calificada como