ABB y la empresa sueca de energía nuclear Blykalla han firmado un Memorando de Entendimiento (MoU) para acelerar la introducción de pequeños reactores modulares (SMR) refrigerados por plomo para aplicaciones marítimas, con el objetivo de descarbonizar la industria naviera mundial. Esta colaboración marca un paso significativo en el desarrollo de soluciones de energía limpia para el sector marino.

El sector tecnológico se enfoca en la descarbonización marítima con SMR nucleares

Las bolsas estadounidenses experimentaron un desarrollo notable en el sector de la energía limpia con el anuncio de una asociación estratégica destinada a revolucionar la propulsión marítima. ABB y la empresa sueca de energía nuclear Blykalla han formalizado un Memorando de Entendimiento (MoU) para acelerar la integración de pequeños reactores modulares (SMR) refrigerados por plomo en la industria marítima. Esta iniciativa está diseñada para abordar la apremiante necesidad de descarbonización dentro del transporte marítimo mundial.

El evento en detalle

Esta colaboración ampliada se basa en un acuerdo existente entre Blykalla y ABB, inicialmente centrado en el desarrollo de la tecnología SMR refrigerada por plomo para apoyar los objetivos de electricidad limpia de Suecia. El MoU actual extiende este enfoque a las aplicaciones marinas, apuntando específicamente al despliegue del Reactor Avanzado de Plomo Sueco (SEALER) de Blykalla. El SEALER se caracteriza por ser un reactor muy compacto y pasivamente seguro, diseñado con estructuras de seguridad inherentes que no requieren intervención del operador.

La contribución de ABB a esta asociación aprovechará su amplia experiencia en integración de sistemas, distribución de energía, control y tecnologías de automatización, que se consideran cruciales para el despliegue exitoso de SMR como soluciones a bordo. El momento de esta asociación se alinea con los movimientos regulatorios recientes; en junio, las administraciones de la Organización Marítima Internacional (OMI) en el Comité de Seguridad Marítima (MSC 110) respaldaron las recomendaciones para revisar el Código de Seguridad para Buques Mercantes Nucleares. Esta revisión tiene como objetivo acomodar los avances en la tecnología nuclear, incluidos los SMR, facilitando así su integración en el transporte marítimo comercial.

Análisis de la reacción del mercado y el contexto más amplio

Esta colaboración está preparada para posicionar estratégicamente a ABB como líder en la propulsión nuclear marítima, catalizando potencialmente una transformación significativa dentro del panorama energético de la industria naviera. Abre una nueva vía de mercado para la tecnología SMR y se anticipa que atraerá más inversión e innovación en soluciones marítimas limpias. Las implicaciones más amplias del mercado son sustanciales, lo que indica un movimiento tangible hacia la viabilidad comercial y la aceptación regulatoria de los SMR para la propulsión de buques.

La industria marítima está evaluando cada vez más la energía nuclear como una fuente de energía viable para cumplir con los estrictos objetivos de descarbonización. Si bien no se revelaron cifras financieras específicas relacionadas con este MoU en particular, el mercado nuclear marino en general se valoró en 2.300 millones de dólares en 2022 y se proyecta que crezca a una tasa anual del 8,8%, alcanzando potencialmente los 4.900 millones de dólares para 2031. Los estudios sugieren que la propulsión nuclear ofrece el costo operativo más bajo por tonelada transportada para grandes embarcaciones, en gran parte debido a la alta densidad energética del combustible nuclear. Se espera que esta ventaja compense los mayores gastos de capital iniciales, que pueden ser de 3 a 5 veces el valor de un barco básico. Además, los buques eléctricos nucleares son inmunes a los esquemas de impuestos al carbono, lo que proporciona un beneficio económico a largo plazo, aunque pueden incurrir en mayores costos de tripulación debido a los requisitos de capacitación especializada.

Comentario de expertos

Los líderes de la industria han expresado optimismo con respecto al potencial de la asociación.

Juha Koskela, presidente de la división Marine & Ports de ABB, declaró: “Los SMR tienen un potencial significativo para impulsar la descarbonización, y nuestra colaboración con Blykalla ayudará a avanzar en su viabilidad en aplicaciones marítimas. Los SMR de próxima generación permitirán diseños de barcos innovadores que pueden ayudar a reducir las emisiones en comparación con los buques propulsados por combustibles basados en carbono. Estamos orgullosos de asociarnos con Blykalla en lo que representa un paso importante en el viaje de descarbonización del transporte marítimo.”

Jacob Stedman, CEO de Blykalla, se hizo eco de este sentimiento: “Estamos encantados de extender nuestra asociación con ABB a este vertical estratégicamente importante. Con nuestro diseño de reactor compacto, vemos una oportunidad única para liderar el camino en la propulsión nuclear marítima, una solución posicionada de manera única para satisfacer la demanda de energía limpia del sector.”

Mirando hacia el futuro

Se espera que el acuerdo fomente una mayor inversión e innovación en la propulsión nuclear marina, influenciando en el futuro diseño de los buques, la infraestructura de combustible y las regulaciones ambientales. Blykalla tiene como objetivo alcanzar la criticidad para su primer reactor SEALER para 2030 y comenzar la producción en serie en la década de 2030. La visión a largo plazo incluye la generación de hasta 500 TWh de electricidad limpia anualmente, lo que podría reducir las emisiones globales de CO₂ en 0,5 gigatoneladas cada año.

Si bien el camino a seguir implica abordar los obstáculos regulatorios, gestionar la percepción pública y desarrollar nuevos modelos de negocio, particularmente para los armadores que enfrentan altos costos de capital iniciales, el impulso para la energía nuclear en el transporte marítimo parece estar creciendo. Otras empresas, como la startup nuclear británica Core Power, también están avanzando en programas nucleares marítimos, anticipando los primeros pedidos de buques equipados con energía nuclear antes de 2030.