Xiaomi Inicia la Retirada de Software para Vehículos Eléctricos SU7
Xiaomi ha anunciado una corrección de software remota para 116.887 de sus vehículos eléctricos SU7, abordando un fallo dentro del sistema de asistencia al piloto de autopista L2. Esta retirada abarca los modelos SU7 de edición estándar producidos entre el 6 de febrero de 2024 y el 30 de agosto de 2025. El defecto ha sido identificado como una respuesta inadecuada a escenarios de conducción extremos, citando una "insuficiente capacidad de reconocimiento, advertencia y manejo" en situaciones críticas.
La medida sigue a un accidente fatal en marzo de 2025 que involucró un SU7 operando en modo de conducción asistida, que resultó en tres muertes. Este incidente provocó un escrutinio regulatorio inmediato por parte de la Administración Estatal para la Regulación del Mercado de China.
Respuesta del Mercado e Impacto Financiero en Xiaomi
El anuncio, junto con el accidente fatal anterior, desencadenó una reacción significativa del mercado. Las acciones de Xiaomi que cotizan en Hong Kong experimentaron una caída inmediata del 6,1%, eliminando aproximadamente 70 mil millones de HKD en valor de mercado. Si bien el costo directo asociado con la corrección de software por aire (OTA) se considera mínimo, las repercusiones financieras más amplias son evidentes en la erosión de la confianza de los inversores y los posibles impactos a largo plazo en las ventas.
A pesar de los contratiempos, la división de vehículos eléctricos de Xiaomi ha mostrado signos de reducir las pérdidas, reportando una pérdida de 500 millones de yuanes (69 millones de dólares) el último trimestre, una mejora con respecto a los 700 millones de yuanes anteriores. La compañía anticipa que la división de vehículos eléctricos logrará rentabilidad en la segunda mitad de 2025. El consenso de los analistas sugiere un precio objetivo a un año para Xiaomi (XIACF) de 43,00 dólares, lo que indica un potencial alcista sustancial del 486,63% desde un precio de negociación de 7,33 dólares, aunque algunas estimaciones, como el valor GF de GuruFocus de 5,91 dólares, sugieren un posible descenso del 19,37%.
Desafíos Estratégicos y Confianza del Consumidor
La retirada subraya las posibles brechas de calidad sistémicas en las elecciones de diseño de sensores de reducción de costos de Xiaomi, específicamente la omisión de la tecnología LiDAR en el sistema de conducción autónoma basado en visión del SU7. Esto contrasta con las estrategias de refinamiento más basadas en datos de algunos competidores y ha contribuido a una disminución de la confianza del consumidor.
Los nuevos pedidos para el modelo SU7 cayeron un 55% en abril de 2025 en comparación con las cifras de marzo. Esto sigue a preocupaciones de calidad anteriores, incluido un retiro de 30.931 unidades SU7 por un sistema de estacionamiento autónomo defectuoso y una baja clasificación en el ranking de calidad automotriz de China del primer trimestre de 2025 para vehículos eléctricos de batería grandes (BEV), donde acumuló 239 puntos de penalización. Tales problemas recurrentes y los esfuerzos agresivos de expansión de vehículos eléctricos corren el riesgo de dañar significativamente la reputación de Xiaomi si no van acompañados de medidas más sólidas de validación de seguridad y transparencia.
Implicaciones Más Amplias para el Sector de Vehículos Eléctricos
Este evento destaca el precario equilibrio entre la innovación rápida y la seguridad en el sector de vehículos eléctricos (VE) en rápida evolución. El accidente fatal y la posterior retirada han provocado una respuesta regulatoria a nivel nacional en China, lo que ha llevado a una supervisión más estricta de las tecnologías de asistencia al conductor. Las autoridades chinas están ahora implementando nuevos borradores de estándares de seguridad para los sistemas de asistencia a la conducción de Nivel 2, que se espera que entren en vigor en 2027. Además, los reguladores han prohibido a los fabricantes de automóviles usar términos como "conducción inteligente" y "conducción autónoma" en la publicidad, enfatizando la necesidad de claridad y precisión.
Este aumento del escrutinio y la presión regulatoria probablemente afectarán a todo el ecosistema de vehículos eléctricos, impulsando la adopción de protocolos de seguridad más robustos y potencialmente influyendo en la confianza de los inversores en el mercado más amplio de vehículos inteligentes. El incidente subraya la necesidad imperativa de que la ambición tecnológica se combine con procesos de validación rigurosos para prevenir repercusiones tanto reputacionales como financieras en un mercado donde la confianza pública en la seguridad de los vehículos eléctricos sigue siendo frágil.