Laos aprovecha la energía hidroeléctrica para abordar la crisis de la deuda mediante la minería de criptomonedas

Laos, una nación sin litoral en el sudeste asiático, está adoptando cada vez más la minería de criptomonedas como una respuesta estratégica a sus dobles desafíos: una deuda nacional significativa y un excedente de energía hidroeléctrica. La ambición a largo plazo del país de convertirse en la "batería del sudeste asiático" ha resultado en una extensa construcción de presas, creando un exceso de oferta de energía pero también acumulando obligaciones financieras sustanciales.

El evento en detalle

El gobierno de Laos está persiguiendo activamente la concesión de licencias para plataformas locales de comercio de criptomonedas y operaciones de minería. Esta iniciativa está diseñada para convertir la electricidad que de otro modo estaría infrautilizada en ganancias económicas, generando así divisas fuertes para el estado. Si bien las autoridades han expresado cautela con respecto a los riesgos inherentes que plantea la naturaleza volátil de los activos digitales, el imperativo económico parece estar impulsando esta dirección política. Laos no es el único en explorar este camino; otras naciones como Bután, Pakistán y Francia también están examinando o implementando estrategias para aprovechar el excedente de energía para la minería de Bitcoin, lo que indica una tendencia global creciente en la monetización de los recursos energéticos a través de activos digitales.

Análisis de la reacción del mercado y los motores económicos

El giro de Laos hacia la minería de criptomonedas es principalmente una respuesta a una aguda crisis de la deuda. La empresa de servicios públicos estatal, Électricité du Laos (EDL), informó una carga total de deuda de 5.400 millones de dólares estadounidenses en 2023, con el sector energético más amplio contribuyendo con más de 6.000 millones de dólares estadounidenses a la exposición general de la deuda del gobierno. Esta tensión financiera se atribuye en gran medida al extenso desarrollo hidroeléctrico, predominantemente financiado con préstamos chinos. Los pagos del servicio de la deuda se han disparado drásticamente, alcanzando los 1.700 millones de dólares en 2023, y se estima que la deuda pública y garantizada públicamente (PPG) total ahora supera el 100% del PIB. China posee casi la mitad de la deuda externa soberana de Laos.

La justificación del gobierno se centra en diversificar las fuentes de ingresos y asegurar divisas fuertes en medio de mercados de exportación limitados. Sin embargo, la política no está exenta de críticas y riesgos inherentes. Las preocupaciones incluyen la volatilidad extrema de los precios de las criptomonedas, los posibles impactos ambientales de la extensa red de presas y la estabilidad de la red energética. Incidentes pasados, como las sequías estacionales, ya han provocado suspensiones temporales del suministro de energía a las operaciones mineras, lo que subraya el precario equilibrio entre la oferta y la demanda de energía.

Contexto e implicaciones más amplias

Los desafíos económicos de Laos se extienden más allá de la deuda, con ciudadanos que enfrentan una inflación persistentemente alta y una moneda nacional, el kip, que se ha depreciado a la mitad frente al dólar estadounidense en los últimos cinco años. El mercado global de minería de criptomonedas, valorado en 2.200 millones de dólares estadounidenses en 2024, se proyecta que crecerá a 3.300 millones de dólares estadounidenses para 2030, con una Tasa de Crecimiento Anual Compuesta (CAGR) del 6,9%. Esta expansión está impulsada por el aumento de los casos de uso de blockchain y la creciente adopción institucional de criptoactivos.

Bután ofrece un ejemplo convincente de una pequeña nación que integra con éxito la minería de Bitcoin de propiedad estatal con su abundante energía hidroeléctrica. En julio de 2025, Bután poseía más de 11.400 Bitcoin, valorados en aproximadamente 1.400 millones de dólares, lo que representa alrededor del 40% del PIB del país. Esto demuestra el potencial de los activos digitales para servir como una fuente significativa de ingresos para los servicios públicos.

Laos ha establecido un marco regulatorio claro para sus empresas de cripto, incluida una tarifa de regalías de 500.000 dólares estadounidenses por licencia de minería y un impuesto de 1.000.000 de dólares estadounidenses por cada 10 megavatios de electricidad consumida, pagaderos al presupuesto estatal.

Comentario de expertos

Las críticas a la estrategia de Laos enfatizan su naturaleza reactiva. Witoon Permpongsacharoen, director de la Red de Energía y Ecología del Mekong, declaró:

"Que Laos permita que la electricidad se utilice para la minería de criptomonedas claramente no es algo impulsado por condiciones internas. Proviene del hecho de que Laos está muy endeudado y no puede pagar sus deudas."

Esta perspectiva resalta la opinión de que la política es una consecuencia de la angustia financiera existente en lugar de una estrategia económica proactiva y con visión de futuro.

Mirando hacia el futuro

El éxito y la viabilidad a largo plazo de la iniciativa de minería de criptomonedas de Laos dependen de varios factores críticos. Estos incluyen la estabilidad sostenida de los mercados globales de criptomonedas, la disponibilidad constante del excedente hidroeléctrico y la capacidad del gobierno para gestionar eficazmente los desafíos ambientales y de estabilidad de la red asociados. Si Laos supera con éxito estas complejidades, su enfoque podría sentar un precedente para otras naciones en desarrollo que buscan monetizar los excedentes de energía, integrando así aún más los activos digitales en los marcos económicos globales. Por el contrario, cualquier revés significativo podría exacerbar la ya precaria situación financiera de la nación y potencialmente disminuir la confianza en las empresas de criptomonedas patrocinadas por el estado.