Preocupaciones sobre la independencia del Banco Central pesan sobre el dólar estadounidense
Los mercados financieros de EE. UU. han reaccionado a las crecientes preocupaciones sobre la independencia de la Reserva Federal de EE. UU., tal como lo expresó el gobernador del Banco de Canadá, Tiff Macklem. Macklem destacó que las presiones políticas sobre el banco central estadounidense están comenzando a manifestarse en consecuencias tangibles en el mercado, impactando notablemente el papel tradicional del dólar estadounidense como activo de refugio seguro.
El evento en detalle
Hablando el martes 23 de septiembre de 2025, Macklem expresó públicamente su aprensión con respecto a los repetidos intentos del presidente Donald Trump de influir en la Reserva Federal de EE. UU. Estas acciones incluyen demandas de recortes de tasas de interés más agresivos y esfuerzos para destituir a funcionarios de la Fed, como la gobernadora Lisa Cook. La propia Reserva Federal implementó un recorte de tasas de 25 puntos básicos en septiembre de 2025, reduciendo el rango objetivo de la tasa de fondos federales a 4.00%-4.25%. Este movimiento, la primera flexibilización desde diciembre de 2024, fue influenciado por un debilitamiento del mercado laboral y una inflación persistente. El presidente de la Fed, Jerome Powell, reconoció que las tasas actuales seguían siendo "algo restrictivas", y el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) indicó que se anticipaban dos reducciones de tasas adicionales en 2025. Sin embargo, las divisiones internas dentro del FOMC fueron evidentes, con Stephen Miran, un nominado de Trump, disintiendo y abogando por un recorte mayor de 50 puntos básicos.
Análisis de la reacción del mercado
La erosión percibida de la independencia de la Fed, junto con las políticas comerciales de la administración Trump, ha tenido un impacto notable en los mercados de divisas. El dólar estadounidense se ha depreciado aproximadamente un 10% desde abril de 2025, cuando se introdujeron los aranceles globales. Esto marca su peor desempeño en el primer semestre en más de 50 años, cayendo a su nivel más bajo desde marzo de 2022. Históricamente, los inversores han acudido en masa a los activos denominados en dólares durante períodos de incertidumbre, pero Macklem observó que el valor del dólar como cobertura "puede que ya no esté allí, o puede que no sea tan confiable como lo era". Este cambio ha llevado a los inversores extranjeros a cubrir más su exposición al dólar estadounidense, contribuyendo a su presión a la baja. Al mismo tiempo, el precio del oro, un activo de refugio seguro tradicional, ha subido un 40% durante 2025, con un salto del 25% en el primer semestre del año a medida que los inversores buscaban reservas de valor alternativas. La volatilidad del mercado se disparó anteriormente en 2025, en particular cuando el S&P 500 cayó un 10,5% en dos días después de los anuncios iniciales de aranceles, aunque desde entonces se ha observado cierta recuperación.
Contexto más amplio e implicaciones
El debilitamiento del dólar estadounidense tiene importantes ramificaciones para el comercio global y los flujos de inversión. Una depreciación sostenida podría, en teoría, ayudar a equilibrar el déficit comercial de EE. UU. Para los inversores, este entorno fomenta una recalibración de las carteras, con asignaciones reducidas a posiciones de alta liquidez y una extensión de las duraciones de los bonos. Se espera que los mercados emergentes y las acciones internacionales superen potencialmente a las acciones estadounidenses. Para Canadá, la situación subraya las vulnerabilidades de sus industrias sensibles al comercio. El gobernador Macklem señaló que los aranceles del presidente Trump han colocado el crecimiento económico canadiense en una "trayectoria permanentemente más baja", afectando a las industrias a pesar de las exenciones del T-MEC. En respuesta a la debilidad económica interna, incluida una disminución del PIB real y un aumento del desempleo (7,1% en agosto), la Banco de Canadá redujo recientemente su tasa de interés de referencia en un cuarto de punto a 2,5%. Este movimiento, anterior a los comentarios de Macklem del 23 de septiembre, destaca la necesidad de Canadá de adaptarse a un entorno comercial cambiante y refuerza la importancia de su propia independencia de la política monetaria. La inflación sigue siendo una preocupación para EE. UU., con el índice de precios de Gastos de Consumo Personal (PCE) proyectado para disminuir al 3% en 2025, pero la inflación subyacente se mantiene elevada en un 3,1%, potencialmente exacerbada por las presiones de precios impulsadas por los aranceles.
Comentarios de expertos
El gobernador del Banco de Canadá, Tiff Macklem, enfatizó el papel fundamental de la independencia del banco central para la estabilidad económica.
"La lección de la historia es clara... los bancos centrales que tienen independencia operativa para la política monetaria hacen un mejor trabajo al ofrecer estabilidad de precios a sus ciudadanos."
También elogió al presidente de la Fed, Jerome Powell, por navegar en un entorno desafiante, afirmando que Powell está "haciendo un muy buen trabajo en circunstancias muy difíciles". Los analistas de Unicredit se hicieron eco de estos sentimientos con respecto al desempeño del dólar, señalando:
"El dólar estadounidense es el perdedor más notable hasta ahora este año, ya que ha perdido un 10% frente a otras monedas, y las preocupaciones de los inversores con respecto a las políticas de Trump han pesado sobre el dólar."
Mirando hacia el futuro
La trayectoria del dólar estadounidense y la estabilidad del mercado financiero global dependerán en gran medida de la independencia percibida de la Reserva Federal y de la retórica política continua en torno a la política monetaria. Los inversores seguirán de cerca los próximos informes económicos, las decisiones políticas adicionales de la Fed (que espera dos recortes de tasas más en 2025) y cualquier cambio en la política comercial de EE. UU. Para Canadá, el enfoque seguirá siendo el desarrollo de nuevos mercados globales y las reformas estructurales internas para mitigar la dependencia de su vecino del sur. Se anticipa una alta volatilidad continua, especialmente en los mercados de divisas, a medida que se desarrollen estas dinámicas.