Mineros de Bitcoin AI/HPC repuntan mientras las acciones de AMD suben un 30% por el acuerdo de chips con OpenAI
Resumen Ejecutivo
El acuerdo multimillonario de chips de OpenAI con Advanced Micro Devices (AMD) ha provocado un repunte significativo en las acciones de AMD, impulsando posteriormente el rendimiento del mercado de las empresas mineras de Bitcoin centradas en IA/HPC. Este desarrollo subraya una creciente convergencia entre la infraestructura de inteligencia artificial y la minería de criptomonedas, atrayendo un mayor interés de los inversores en las empresas que unen estos dos dominios de alto crecimiento.
El Evento en Detalle
OpenAI ha finalizado un acuerdo multimillonario con AMD, que incluye el compromiso de desplegar 6 gigavatios de capacidad de cómputo utilizando las GPU Instinct de AMD durante varios años, con el despliegue inicial de 1 gigavatio programado para la segunda mitad de 2026. Esta asociación estratégica otorga a OpenAI una orden para comprar hasta 160 millones de acciones comunes de AMD, lo que podría conducir a una participación del 10% en el fabricante de chips. La adquisición de estas acciones está supeditada a hitos específicos de despliegue y precios.
Tras el anuncio, las acciones de AMD subieron aproximadamente un 30% en las operaciones previas al mercado. Esto sigue al acuerdo anterior de OpenAI de 100 mil millones de dólares en capital y suministro de chips con Nvidia, que cubrió 10 gigavatios de necesidades de infraestructura. Combinados, estos acuerdos posicionan a OpenAI más cerca de su objetivo de infraestructura de 23 gigavatios, lo que representa aproximadamente 1 billón de dólares en gasto de infraestructura comprometido. La reacción del mercado se extendió a las empresas mineras de Bitcoin centradas en IA/HPC, con Bitfarms Ltd. subiendo un 10,71%, HIVE Digital Technologies Ltd. registrando una ganancia del 12,72% e IREN Ltd. aumentando un 3,38%. Otros mineros, incluidos Cipher Mining, CleanSpark y TerraWulf, también registraron ganancias entre el 5% y el 12%.
Desglosando la Mecánica Financiera
La mecánica financiera del acuerdo OpenAI-AMD implica el despliegue de las GPU Instinct de AMD en 6 gigavatios de cómputo durante varios años, con el primer gigavatio para la segunda mitad de 2026. Si bien el valor exacto se indicó como "miles de millones", un componente clave es la orden que permite a OpenAI adquirir hasta 160 millones de acciones de AMD, lo que representa una participación potencial del 10%. El calendario de desbloqueo de esta orden está vinculado al logro de hitos específicos de despliegue y precios.
Paralelamente, Galaxy Digital Inc. ha asegurado una facilidad de financiación de proyectos de 1.400 millones de dólares para financiar la modernización y expansión de su campus de centro de datos Helios en el oeste de Texas para operaciones de IA y computación de alto rendimiento. Esta facilidad de deuda, con un plazo de 36 meses, está garantizada por todos los activos asociados con la primera fase de construcción de Helios. Galaxy ha proporcionado un requisito de capital de 350 millones de dólares, y la facilidad de deuda cubre los costos de construcción restantes. CoreWeave Inc. se ha comprometido a utilizar la capacidad de energía aprobada de 800 MW en el campus de Helios, proyectando ingresos anuales promedio superiores a 1.000 millones de dólares para Galaxy durante el plazo de 15 años de los acuerdos. Esta facilidad destaca el capital significativo que se está desplegando para transformar la infraestructura de minería de criptomonedas en centros de cómputo de IA.
Empresas como IREN ya están demostrando los beneficios financieros de este giro, reportando un aumento interanual del 226% en los ingresos a 187,3 millones de dólares en el segundo trimestre de 2025 al integrar los servicios de la nube de IA con la minería de Bitcoin. Su acceso a energía de bajo costo, a aproximadamente 2,7 ¢/kWh, proporciona una ventaja de costo significativa sobre los proveedores de la nube tradicionales, amplificando aún más las ganancias de eficiencia de capital.
Estrategia Empresarial y Posicionamiento en el Mercado
La estrategia comercial central que emerge en el panorama de los activos digitales implica que los mineros de Bitcoin reutilicen sus operaciones intensivas en energía para satisfacer la creciente demanda de cómputo de IA. Esta transición aprovecha la infraestructura energética existente, originalmente optimizada para la minería de criptomonedas, para cargas de trabajo de IA de mayor margen. Empresas como IREN y Cipher Mining están modernizando sus instalaciones para servir a dos propósitos: la producción de Bitcoin y la computación de alto rendimiento (HPC).
La instalación Black Pearl Fase I de Cipher Mining, por ejemplo, opera con una eficiencia de 19,2 J/TH mientras mantiene la flexibilidad para alternar entre la minería de Bitcoin alimentada por energía hidráulica y las cargas de trabajo de HPC. Esta adaptabilidad transforma los costos fijos asociados con la infraestructura energética en activos escalables. Los gigantes de Internet también se están involucrando directamente en esta tendencia; Google ha tomado una participación del 5,4% en Cipher Mining a través de un acuerdo de centro de datos de IA de 3 mil millones de dólares a 10 años, y una participación del 14% en TeraWulf. Varias empresas mineras, incluidas CleanSpark y Hive Digital, se han renombrado para destacar sus servicios de cómputo con GPU e IA, lo que refleja un cambio estratégico más amplio hacia convertirse en proveedores de infraestructura de cómputo para la futura economía digital, en lugar de ser únicamente generadores de monedas. Esta estrategia tiene como objetivo desbloquear nuevas fuentes de ingresos y optimizar los activos existentes de manera eficiente en capital.
Contexto Más Amplio
Esta convergencia de la minería de Bitcoin y la infraestructura de IA está remodelando el panorama de los activos digitales, impulsada por vientos de cola macroeconómicos y la innovación tecnológica. La "revolución de la eficiencia del capital" ve a los mineros de Bitcoin utilizar su experiencia en optimización energética para cargas de trabajo de IA, que ofrecen ingresos significativamente más altos por kilovatio-hora que la minería tradicional. Se espera que esto atraiga una inversión institucional sustancial, con asignaciones que alcanzarán los 219 mil millones de dólares para los ETF de Bitcoin y la minería en 2025, impulsando la confianza del mercado y la seguridad de la red.
Sin embargo, este panorama en evolución también introduce consideraciones regulatorias. Organismos como la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) y la Unión Europea (UE) han expresado preocupaciones con respecto al posible uso indebido de la IA en el comercio y el fraude de criptomonedas. Las principales preocupaciones incluyen la manipulación del mercado, el problema de la "caja negra" donde las decisiones de IA son opacas y nuevas vías para el delito financiero. Los reguladores enfatizan la necesidad de sistemas de IA transparentes y auditables que no contribuyan al riesgo sistémico. Además, el advenimiento de "mineros de IA" autónomos, bots de software, podría conducir a una mayor rentabilidad y eficiencia, pero también plantea preocupaciones sobre la centralización y nuevos riesgos de seguridad de los ataques coordinados de bots de IA, lo que podría alterar la naturaleza descentralizada de las criptomonedas si unos pocos grandes actores monopolizan las operaciones mineras. A pesar de estos riesgos, el reposicionamiento estratégico de las empresas mineras para servir a los clientes de IA se proyecta para contribuir a objetivos de precio de Bitcoin de 200.000 a 210.000 dólares dentro de 12 a 18 meses, lo que refleja una demanda institucional sostenida y factores estructurales del mercado.