Resumen ejecutivo
El Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de EE. UU. se reunirá la próxima semana para considerar una moción para un nuevo juicio para Sam Bankman-Fried, el fundador de FTX. Bankman-Fried fue previamente condenado por siete cargos de conspiración y fraude, lo que resultó en una sentencia de 25 años de prisión. La próxima audiencia se centrará en la conducta del juicio inicial en lugar de volver a litigar los cargos originales.
El evento en detalle
Sam Bankman-Fried se enfrenta a una audiencia en el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de EE. UU. el 4 de noviembre, donde se presentarán argumentos sobre su moción para un nuevo juicio. Su equipo de defensa ha presentado un documento de apelación de 102 páginas que impugna su condena por siete cargos de delitos graves y la sentencia de 25 años de prisión. El equipo legal ha solicitado formalmente un nuevo examen, proponiendo que un nuevo juicio sea presidido por diferentes jueces para garantizar la equidad e independencia judicial.
Bankman-Fried fue declarado culpable de múltiples cargos, incluyendo dos cargos de fraude electrónico, dos cargos de conspiración para cometer fraude electrónico, un cargo de conspiración para cometer fraude de valores, un cargo de conspiración para cometer fraude de productos básicos y un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero. Fue implicado en la malversación de miles de millones de dólares de fondos de clientes depositados en FTX, defraudando a los inversores de FTX de más de 1.700 millones de dólares y engañando a los prestamistas de Alameda Research de más de 1.300 millones de dólares. El tribunal ordenó la confiscación de 11.000 millones de dólares como parte de su sentencia.
Antes de la apelación, la familia de Bankman-Fried publicó un documento de 64 páginas que caracterizaba el colapso de FTX como una "crisis de liquidez". Por separado, el equipo de Bankman-Fried emitió un documento de 14 páginas afirmando que FTX poseía 136.000 millones de dólares en activos y era solvente cuando se declaró en bancarrota. Atribuyeron los procedimientos de bancarrota al asesor legal externo de FTX, alegando que descarriló un plan de recuperación. Bankman-Fried sostuvo que la situación era manejable, con 20.000 millones de dólares en depósitos de clientes de 7 millones de usuarios intactos, y que una resolución estaba a punto de completarse antes de la intervención legal externa.
Durante la próxima audiencia, el fiscal de EE. UU. para el Distrito Sur de Nueva York y el equipo de defensa de Bankman-Fried, dirigido por Alexandra Shapiro, tendrán cada uno 10 minutos para presentar sus argumentos.
Implicaciones para el mercado
Las repercusiones financieras del colapso de FTX continúan manifestándose. Si bien aproximadamente el 98% de los acreedores han recibido nominalmente un reembolso del 120%, y se proyecta que otros recibirán entre el 119% y el 143%, la tasa de recuperación real de los criptoactivos ha sido significativamente menor. Debido a los aumentos sustanciales en el valor de mercado de Bitcoin y Solana desde noviembre de 2022, la tasa de recuperación real de los criptoactivos se estima entre el 9% y el 46%, con recuperaciones de Bitcoin en aproximadamente el 22% y Solana en el 12%. Esta discrepancia destaca el impacto de la apreciación del mercado en las estructuras de reembolso denominadas en fiat después de las insolvencias de criptomonedas.
Contexto más amplio
Los procedimientos del Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito son observados de cerca por la industria de activos digitales. Un precedente reciente, United States v. Chastain, vio al Segundo Circuito anular las condenas por fraude electrónico y lavado de dinero en un caso de uso de información privilegiada de criptomonedas. El tribunal en ese caso citó errores perjudiciales en las instrucciones al jurado con respecto al valor de la propiedad y las costumbres sociales, lo que requirió un nuevo juicio. Este fallo subraya las complejidades involucradas en la aplicación de marcos legales tradicionales a casos novedosos de activos digitales.
El resultado de la apelación de Bankman-Fried podría establecer importantes precedentes legales. Tiene el potencial de influir en el tratamiento regulatorio de los activos digitales, reformar la interpretación del test de Howey y afectar la trayectoria futura de los mercados de criptomonedas dentro de los Estados Unidos. La participación del tribunal de apelaciones en este caso, mientras aún está pendiente, puede tener implicaciones de gran alcance para la supervisión regulatoria y el manejo judicial de los delitos relacionados con las criptomonedas.
fuente:[1] El Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de EE. UU. celebrará una audiencia sobre la moción de nuevo juicio de SBF el 4 de noviembre (https://www.techflowpost.com/newsletter/detai ...)[2] Secretaria del Tesoro de EE. UU. Bessant: Si la inflación baja, la Reserva Federal debería recortar las tasas de interés. - Odaily (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)[3] El Segundo Circuito escuchará un recurso de apelación interlocutorio crítico en una acción de cumplimiento de valores criptográficos (https://vertexaisearch.cloud.google.com/groun ...)