Resumen Ejecutivo

FTX tiene previsto distribuir 1.600 millones de dólares adicionales a sus acreedores a partir del 30 de septiembre de 2025. Esto marca la tercera distribución bajo el plan de reorganización del Capítulo 11 de la bolsa, siguiendo pagos anteriores en febrero y mayo de 2025. El proceso en curso tiene como objetivo devolver más de 15.000 millones de dólares en activos recuperados a las partes afectadas, reforzando la importancia de la recuperación estructurada de activos en insolvencias financieras a gran escala dentro del sector de activos digitales.

El Evento en Detalle

El Fideicomiso de Recuperación de FTX anunció el 19 de septiembre de 2025 que se desembolsarán aproximadamente 1.600 millones de dólares a los titulares de reclamaciones aprobadas en las Clases de Conveniencia y No Conveniencia. Se espera que los acreedores elegibles reciban los fondos dentro de uno a tres días hábiles a partir del 30 de septiembre de 2025, a través de su proveedor de servicios de distribución elegido: Bitgo, Kraken o Payoneer.

La distribución sigue una estructura de prioridad en "cascada" detallada en el Plan de Reorganización del Capítulo 11. Las tasas de recuperación incrementales y acumulativas específicas son:

  • Las Reclamaciones de Derechos de Clientes Dotcom de Clase 5A Aprobadas recibirán una distribución incremental del 6%, llevando su recuperación acumulativa al 78%.
  • Las Reclamaciones de Derechos de Clientes de EE. UU. de Clase 5B Aprobadas están programadas para una distribución del 40%, alcanzando una tasa de recuperación acumulativa del 95%.
  • Las Reclamaciones Generales No Garantizadas de Clase 6A Aprobadas y las Reclamaciones de Préstamos de Activos Digitales de Clase 6B recibirán cada una una distribución del 24%, elevando su recuperación acumulativa al 85%.
  • Las Reclamaciones de Conveniencia de Clase 7 Aprobadas recibirán una distribución del 120%.

Para facilitar estos pagos, los acreedores deben completar los requisitos previos a la distribución, incluyendo la verificación Conozca a su Cliente (KYC), la presentación de los formularios fiscales requeridos y la incorporación con uno de los proveedores de servicios de distribución designados.

Implicaciones para el Mercado

Esta sustancial distribución significa un progreso continuo en uno de los casos de bancarrota más grandes y complejos de la industria de las criptomonedas, que comenzó con el colapso de FTX el 11 de noviembre de 2022. La reinyección de 1.600 millones de dólares en el ecosistema cripto tiene el potencial de influir en la liquidez del mercado y el sentimiento de los inversores. Si bien el proceso demuestra la eficacia de los mecanismos robustos de recuperación de activos, también destaca los debates en curso con respecto a la valoración de las reclamaciones. FTX calcula los valores de las reclamaciones utilizando los precios de las criptomonedas de noviembre de 2022, cuando Bitcoin cotizaba entre 16.000 y 20.000 dólares. Esta es una disparidad considerable con respecto a los precios actuales del mercado, donde Bitcoin cotiza por encima de los 120.000 dólares. Esta metodología de valoración ha provocado frustración entre algunos antiguos usuarios que sostienen que los pagos en efectivo son significativamente menores de lo que valdrían hoy sus criptoactivos.

Comentario de Expertos

Aunque no se proporcionan citas directas de expertos, las acciones del Fideicomiso de Recuperación de FTX y su CEO John Ray III indican un enfoque estratégico en la maximización de la recuperación de los acreedores. Ray III ha declarado previamente que la bolsa anticipa tener más de 16.000 millones de dólares, superando sus deudas estimadas de 11.000 millones de dólares, y tiene como objetivo devolver el 100% de los montos de las reclamaciones de bancarrota más intereses para los acreedores no gubernamentales. Este objetivo contrasta con los resultados generales de muchos procedimientos de bancarrota, particularmente en el incipiente espacio de los activos digitales. La adhesión al cumplimiento normativo, evidenciada por los requisitos de KYC y incorporación, también subraya un movimiento hacia prácticas financieras más estandarizadas dentro de la industria cripto. El enfoque de distribución por fases, dirigido a clases de acreedores específicas con tasas de recuperación variables, refleja una estrategia legal y financiera metódica para navegar por responsabilidades complejas.

Contexto Más Amplio

El caso de bancarrota de FTX sirve como un precedente crítico para la gestión de fallos a gran escala en el mercado de activos digitales. La recuperación de más de 15.000 millones de dólares en activos, incluidos fondos de recuperaciones y la venta de inversiones como participaciones en Anthropic y Robinhood, junto con importantes tenencias en tokens como SOL y SUI, ilustra la naturaleza multifacética de la recuperación de activos en tales situaciones. El plan de reembolso estructurado, aunque genera frustración entre algunos acreedores debido a las disparidades de valoración, en última instancia refuerza la necesidad de marcos regulatorios claros y prácticas operativas transparentes dentro del ecosistema Web3. Las distribuciones continuas, destinadas a la recuperación total para muchos acreedores, contribuyen a reconstruir la confianza en una industria que ha enfrentado un escrutinio sobre la seguridad y la rendición de cuentas.